La firma la creó Carolyn Rafaelian, una guapa americana de familia de joyeros que en 2004 se lanzó a crear su propia firma de bisutería poniéndole el nombre de sus dos hijas mayores. El gran éxito le llegó e el 2004 al crear el concepto patentado de pulseras expandibles, yen poco tiempo se colocó entre las lista de las empresas con mayor crecimiento de EEUU.
El concepto de la firma es único. Carolyn se ha mantenido siempre fiel a la creencia espiritual de que cada uno puede transmitir quién es, su fuerza y poder propio, a través de lo que lleva puesto. En sus complementos podemos ver esa energía "(+) Energy" en la que la creadora tiene tanta fe y responsabiliza su éxito.
En Estados Unidos, celebrities, estilistas, directoras de moda y las mejores tiendas del país adoran el diseño y la filosofía de la marca. En España está pasando lo mismo.
Pero, ¿qué la hace tan especial?
En primer lugar, Alex and Ani es una firma ecofriendly, es decir, respetuosa con el medio ambiente gracias al uso de materiales reciclados.
En Alex and Ani se cree que la belleza viene de lo puro y natural. Así, creando las piezas con materiales reciclados enriquecen la colección, protegen el medioambiente y estimulan la conciencia social. Como destaca Carolyn, "los consumidores pueden utilizar su compra para marcar la diferencia, para proteger nuestro planeta y nuestro futuro".
Otro punto que marca la diferencia es la energía positiva. Todas las piezas de Alex and Ani llevan un mensaje. Los símbolos que utiliza Carolyn en sus diseños transmiten espiritualidad, amor, energía y estilo de vida. Los aros en oro o plata vieja con las medallas colgando del trébol de 4 hojas, o el símbolo de infinito, o la Flor de Lis, o el San Antonio de Padua, son algunos de los ejemplos de sus piezas más vendidas.
Y por último, su aplaudido sistema expandible. Se acabaron los problemas de tallas. La firma ha creado un concepto totalmente original e innovador de cierre, que permite ajustar las pulseras, collares y anillos a todos los tamaños.
Si hemos de ponerle una pega es la adicción. Una vez que te haces con una de sus pulseras quieres otra, y otra, y otra... Sin duda es un regalo perfecto para transmitir el buen rollo que tanta falta nos hace ahora. Para regalar y también para autorregalarnos.
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